La tempestad (hacia 1508)
Giorgione -Giorgio de Castelfranco o Giorgio Barbarelli- fue un pintor destacado del renacimiento en Venecia, creador de un estilo que produjo un importante aporte a la posterior evolución de la pintura. Un ejemplo es la primacía que dio a lo pictórico y al color por sobre el dibujo y la línea.
En “La Tempestad” recrea la naturaleza iluminada por los efectos de la tormenta que se avecina, captando la instantaneidad del rayo que rasga la atmósfera. De esta manera, la naturaleza y la luz se convierten en los verdaderos protagonistas del cuadro, pasando a un papel secundario cualquier otro elemento. Esto da un valor especial a la obra, pues si hasta ese momento el paisaje era un mero complemento de la figura principal, a partir de entonces adquiere una fuerza expresiva y un interés que iría creciendo hasta la aparición de los pintores ingleses del siglo XIX, quienes harán de la exaltación de los fenómenos atmosféricos el centro de sus preocupaciones artísticas