Del francés impression. Movimiento pictórico surgido hacia 1870 en Francia como reacción contra el arte académico. Su primer objetivo fue conseguir una representación del mundo espontánea y directa, y para ello se centraron en los efectos que produce la luz natural sobre los objetos. Su pintura se caracteriza por alcanzar una imagen en donde priman las formas aboceteadas de apariencia espontánea y de un colorido que se distancia de tonalidades oscuras.
Los impresionistas escogieron la pintura al aire libre y los temas de la vida cotidiana, paisajes y escenas de las ciudades, y se preocuparon más por captar la incidencia de la luz sobre el objeto que por la exacta representación de sus formas, eliminando los detalles minuciosos y tan sólo sugiriendo las formas. Para ello emplearon colores primarios -azul, rojo y amarillo- y los complementarios -naranja, verde y violeta.